Las energías verdes son, hoy en día, la mejor opción para el bienestar de nuestro planeta. Y de entre las múltiples energías renovables que se producen actualmente, la huerta solar es una de las alternativas más eficientes en materia de sostenibilidad. Pero ¿qué es? ¿Qué ventajas presenta? En el post de hoy vamos a explicarte en qué consisten los campos solares y cómo funcionan. Y recuerda que puedes enfocar tu futuro profesional hacia las energías renovables a través de la Maestría Internacional en Energía Solar Fotovoltaica.
Índice de contenidos
¿Qué es una huerta solar?
Una huerta solar, que también se conoce como campo solar, se trata de un gran recinto donde hay instalaciones fotovoltaicas de uno o varios dueños y que comparten dicha estructura y servicios.
Para hacernos una idea, se trata de un pequeño parque solar que se utiliza para fines agrarios. Se suelen montar cerca de prados o campos de cultivo y el excedente de energía producida se suele vender. Y aunque la producción de energía en estos campos es menor, una hectárea puede llegar a suministrar electricidad o calefacción hasta 100 familias.
Ventajas y desventajas de los campos solares
Al igual que sucede con otro tipo de instalaciones para producir energías renovables, las granjas solares también tienen sus puntos fuertes y débiles.
Como ventajas, encontramos que generan:
- Cero contaminaciones, porque no se utiliza ninguna materia prima fósil.
- Suministro de energía garantizado, ya que el sol no va a agotarse en miles de años.
- Amortización en poco tiempo de la inversión inicial para la instalación.
- Desarrollo del entorno en el que se encuentre el campo solar, que normalmente suele ser en pueblos con problemas de comunicación, como es el transporte público.
- Auge y cambio de hábitos de consumo energético.
- Reaprovechamiento del suelo, en caso de terrenos improductivos.
- Democratización energética, ya que no solo las grandes compañías pueden producirla.
Ahora bien, ¿qué desventajas presenta una instalación de este tipo? Pues bien, a grandes rasgos encontramos que:
- La inversión inicial es muy elevada, teniendo que aportar una cantidad importante para los materiales e instalación.
- La energía que se obtiene dependerá, en gran medida, de las condiciones climatológicas.
- El almacenamiento y el transporte de este tipo de energía no suele ser sencillo.
Pasos básicos para montar un campo solar
En primer lugar, para montarte un campo solar necesitarás un terreno apropiado y con suficiente espacio para colocar las placas solares. Cuanta mayor superficie, mayor capacidad para generar energía.
El siguiente paso es recurrir a una empresa especializada en la instalación de huertos solares. Y, a su vez, ya sea por ti mismo o por un profesional, necesitarás gestionar toda la documentación y trámites legales que implica una instalación de este tipo. Solo de esta manera podrás producir y vender la energía, si esta es tu intención.
Si lo prefieres, también puedes apostar por huertas solares ya instaladas. Solo necesitarás adquirir o alquilar una pequeña parcela para poder colocar tus placas solares. O si no, puedes contratar una empresa para que se encargue de todo, desde la localización, hasta la instalación y mantenimiento de tu huerta solar.