El coaching personal está de moda definitivamente, porque se ha establecido en la sociedad como un mecanismo muy eficaz para que las personas cambien sus mentalidades, alcancen sus metas y superen sus propias insatisfacciones. Todo ello, mediante la orientación de un coach profesional. Debido a su importancia, en este post vamos a explicarte en qué consiste y cómo se aplica. Y recuerda que puedes formarte en ello a través de la doble maestría en psicología holística y coaching personal. ¡Síguenos!
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¿Qué es el coaching personal?
El coaching individual o personal es una interacción conversacional permanente entre dos personas. De una parte, se encuentra el coach o, lo que es lo mismo, el asesor, instructor, preparador o consejero. De otro lado, está el denominado coacheé que es el cliente y receptor en las sesiones de coaching. Es un proceso básicamente orientador y motivador que deriva en acompañamiento y asistencia personalizada.
Ahora bien, el diálogo constructivo especializado busca que el coacheé adopte y desarrolle pensamientos diferentes a aquellos que le han impedido alcanzar sus metas o que le generan algún grado de insatisfacción. Es necesario conseguir cambios profundos y duraderos en su mentalidad.
Como habrás notado, el coaching personal en su modalidad ontológica no pretende formar ni instruir al coacheé, diciéndole que debe desplegar estas o aquellas conductas concretas y detalladas. El coach no le enseña al cliente que, por ejemplo, para desarrollar el emprendimiento que tiene en mente, debe conseguir un local comercial en este o aquel punto y de estas o aquellas dimensiones.
Entonces, así te hayamos hablado de palabras como instruir, entrenar y formación, es claro que la instrucción, el entrenamiento y la formación misma no son de tipo académico, sino motivacional y tendiente a lograr un profundo cambio de mentalidad en el pupilo. Es este último el que, por sí mismo, debe implementar los mecanismos de cambio.
¿Para qué sirve el coaching personalizado?
El coaching personal ayuda a mejorar aquellos ámbitos de la vida que necesitan de un cambio. Es más, esta modalidad de coaching te permite ejercer un verdadero liderazgo sobre tu vida misma, para que tu existencia sea lo más plena posible.
La superación de conflictos internos (confusiones, dudas permanentes, tristezas que no cesan, insatisfacciones y contradicciones, entre otros) y de problemas externos (laborales por exceso de trabajo o por no tenerlo, inconvenientes familiares o de pareja, etc.) son las dos grandes categorías de temas que se tratan durante el coaching individualizado.
De estas dos grandes categorías iniciales se desprenden otras temáticas, como la incitación a descubrir nuevas maneras de actuar para conseguir resultados diferentes y mejores que los habituales.
Una tutoría personal también ayuda a que el cliente se descubra y se acepte a sí mismo. También contribuye a que se deshaga de miedos y bloqueos infundados, al tiempo que pueda analizar, revisar y eliminar algunas creencias que limitan su existencia. Adicionalmente, el coachee puede aprender a manejar aquellas emociones que son difíciles.
Allanar mental y emocionalmente el terreno para la consecución de los objetivos es otra de las temáticas más comunes en los procesos de coaching individualizado. El desarrollo de un adecuado nivel de autoestima, del tan necesario carisma y de las relaciones familiares, laborales y afectivas, son otros aspectos bastante tratados.
El proceso del coaching individual
El coach cumple funciones similares a las de un psicólogo, ya que observa en detalle y analiza concienzudamente lo que el cliente manifiesta. Al tiempo va descubriendo las carencias de este, así como sus frustraciones para luego identificar el estado ideal que pretende alcanzar el cliente, así como identificar sus propios retos.
Aunque la actitud del coach no debe ser netamente pasiva ni contemplativa, sus dos posturas básicas son escuchar e indagar mediante preguntas en la medida en que capta lo que le sucede al coacheé. Este, a su vez, va obteniendo conclusiones que, por otros medios diferentes al coaching, no podría sacar o las conseguiría con cierta dificultad. Además, el coach le va atribuyendo nombres a los obstáculos que aprecia en el cliente.
Luego, el cliente empieza a observar su propia vida desde perspectivas diferentes a las habituales y aprende a adoptar un cambio de percepción. Ya ve a su entorno y a sí mismo con ojos diferentes. El último paso está en que el cliente se haga responsable y tome las riendas de su vida mediante actitudes y percepciones renovadas.
El perfil profesional del coach
No te vamos a mencionar lo que es el perfil profesional habitual del coach personal. Más bien, te diremos las que son las aptitudes, actitudes y características que se necesitan para que sea un coach ideal en el cumplimiento de sus funciones. Creemos que un coach para el ámbito personal debe ser, ante todo, integral.
Debe contar con habilidades y destrezas, como una muy buena capacidad de comunicación interpersonal, además de saber profundizar adecuadamente en los modos de ser y las experiencias específicas de cada cliente. También debe tener conocimientos bien fundados en disciplinas como la psicología, la antropología, la filosofía, la sociología y, en general, respecto de algunas otras ciencias sociales y humanas.
Un coach personal debe ser empático y comprender las necesidades de las personas. Debe tener una muy buena capacidad para analizar los problemas humanos, ser disciplinado, un buen gestor de recursos y tiempo y, muy importante, saber preguntar y escuchar. También debe ser muy buen motivador.
Para terminar, anotemos que, si deseas formarte como coach personal en el Grupo Inenka Internacional, es el momento de hacerlo. Cursar nuestra maestría en psicología holística y en coaching personal te permitirá desarrollarte profesionalmente, porque se trata de una disciplina muy demandada en la actualidad. Así pues, no dudes en empezar tu experiencia formativa con nosotros y labrarte un futuro profesional prometedor.